Qué significa cada ladrido

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Qué significa cada ladrido

Está claro que los perros y los humanos no tenemos el mismo lenguaje pero sabemos entendernos cuando queremos decirnos algo. Los perros, por su lado, tienen varias formas de comunicación y el ladrido, junto con el lenguaje corporal, es una de ellas.

Con el tiempo hemos ido relacionando el ladrido con un solo significado: el de alerta o enfado. Pero esta forma de comunicación oral puede ser consecuencia de varios sentimientos o puede estar indicándonos otros síntomas.

Para empezar, no siempre es signo de enfado

Tu perro puede ladrar para alertar del peligro, para exigir atención o comida, para expresar su frustración, ansiedad o miedo, o para saludarte cuando llegas a casa. A veces, los perros ladran mientras juegan; otras veces, quiere decir que están aburridos. Además, otra causa del ladrido puede ser la necesidad de proteger sus recursos, como su comida o juguetes.

Pero entonces, ¿estamos malinterpretando todo lo que nos dicen? Y, ¿cómo desciframos cada ladrido?

3 factores a tener en cuenta para descifrar sus ladridos

Para empezar a entender a tu perro hay tres características de su ladrido que deberías identificar rápidamente: la frecuencia, el tono y la duración.

  1. Frecuencia

A mayor frecuencia de ladrido mayor será la urgencia de la llamada. Eso significa que si tu perro emite una breve ráfaga de ladridos está intentando llamar tu atención rápidamente.

  1. Tono

Los ladridos pueden ser agudos o graves. Los agudos se suelen asociar con un perro asustado, mientras que los graves se relacionan con un perro amenazando o intentando intimidar.

  1. Duración

El tiempo que dura cada ladrido también es mesurable. Si un ladrido es rápido y suena como “yip” significa que el perro está asustado mientras que un ladrido largo puede significar que está intentando llegar a más personas.

Guía de ladridos:

Dolor, miedo, urgencia... A partir de estas características puedes conocer mucho sobre lo que tu perro está intentando decirte o puedes identificar de qué tipo de ladrido se trata. Te dejamos una lista de todos los que conocemos:

Ladridos de demanda

Son, probablemente, los ladridos más molestos de todos. Los hacen cada vez que quieren conseguir algo. En este caso, normalmente mezclan ladridos con lloriqueo y pasa, únicamente, en los perros consentidos. A eso se le llama haber mimado a tu perro y la única forma de salir de esta situación es dejar de ceder a la mínima. Si tu perro ladra o lloriquea ante ti para obtener atención o comida, ignóralo. Vete a otra habitación y cierra la puerta si es necesario.

Ladridos de alerta

Estos seguro que ya los conoces... Son los ladridos del perro guardián. Salen a la luz cuando tu perro está intentando avisarte de la llegada de un extraño o de cualquier otro estímulo desconocido e inesperado. Empiezan con sonidos agudos y breves que acaban en ladridos rápidos hasta que el estímulo desaparece.

Ladridos por soledad

Si tu perro sufre de ansiedad por separación estos son los ladridos que vocalizará cada vez que te vayas. Este tipo de ladridos siempre incluyen sollozos y hasta aullidos. En este caso tu perro está demandando compañía y deberás tratar su ansiedad por separación como solución para que no lloriquee cada vez que te marches.

Ladridos juguetones

Al igual que los jugadores de fútbol o baloncesto, los perros también se comunican en el juego y lo hacen vocalmente. Este tipo de ladridos se caracterizan por ser muy breves y fuertes y se les escapan por la emoción o para motivar una persecución.

Ladridos compulsivos

Los que ladran a prácticamente todo: ruidos, gente que pasea por la calle, pájaros, bicicletas... Estos ladridos se dan normalmente en perros que estan sufriendo algún tipo de problema emocional y son debidos a una sensación de miedo. Para solucionarlo deberemos visitar a un especialista que nos ayude a entender la causa de este comportamiento.

Otra causa que provocaría este tipo de ladridos es el aburrimiento. En estos casos deberemos entretenerlo y estimularlo física y mentalmente.

Aullidos

Aunque parezca propio de lobos o, como mucho, de huskies, los perros también aúllan en ocasiones contadas. Esta es una herramienta que utilizan para comunicar información importante a larga distancia: aullando, la voz del perro se propaga más lejos y se mantiene durante más tiempo que un ladrido. Por eso, muchas veces aúllan para acoplarse a una alarma o a una sirena de bomberos que está sonando repetidamente, contribuyendo así a que esa señal de alarma llegue más lejos.

También se puede dar un caso completamente diferente, si el perro está en una situación de peligro o abandono, el aullido es su última herramienta de pedir socorro.

Ladridos de perro viejo

Al hacerse mayores, los perros también sufren de disfunción cognitiva como los humanos y pueden desorientarse o sentirse vulnerables con facilidad. Estos perros utilizarán el ladrido más frecuentemente y será confuso para el humano averiguar la causa o el problema.

En estos casos lo mejor es tener en cuenta que tu perro está sufriendo demencia y no reñirlo por molestarte. Simplemente necesita que lo tranquilices y le hagas sentir seguro.