A la mayoría de los perros les encanta salir a pasear. Les permite salir de sus hogares con sus amados dueños y explorar el mundo que los rodea. Además son una excelente excusa para fortificar la relación y proporcionar el ejercicio necesario y la estimulación mental para tu perro. Si tu perro parece aburrido o se está portando mal es posible que no esté saliendo lo suficiente. Considera llevar a tu perro a pasear al menos entre dos y tres veces al dia.

Prepárate para el paseo con tu perro

Prepararse para salir a caminar no es difícil, ¡lo difícil es encontrar el tiempo para hacerlo! Sin embargo, es importante para la salud y el bienestar de tu perro (sin mencionar el tuyo 😊), así que intenta hacer todo lo posible para dedicarle un tiempo todos los días.

Deberás elegir una correa adecuada para tu perro. Debe ser cómodo tanto para ti como para tu perro, fácil de manejar y no demasiado larga. Importante, antes de sacar a pasear a los cachorros, asegúrate de que se le hayas introducido correctamente la correa. Recomendamos evitar las correas retráctiles, sobretodo si no se usan correctamente. Lo ideal es que tu perro camine a tu lado o procurar que no camine más de unos pocos metros por delante porque no tendrás el control si se presenta una distracción.

También se podría considerar un arnés aparte de un collar. Los arneses redirigen cualquier esfuerzo sobre los hombros y el pecho del perro, pero la correa te dará mayor control. IMPORTANTE, no recomendamos colocar un arnés en un cachorro ya que sus huesos aún están en desarrollo y seguramente no estará acostumbrado a los paseos por lo que tenderá a tirar de la correa constantemente añadiendo presión a la columna y la cadera.

Por último, pero no menos importante, ¡prepárate para divertirte! Caminar no debe verse como una tarea, sino como una experiencia para compartir con tu perro. Muéstrale a su perro que estás emocionado por hacer algo de ejercicio.

Llevar bolsas para las cacas

Parte de ser responsable de un perro es no dejar rastro de que estuviste allí. Eso significa que siempre debes recoger los desechos de tu perro. ¡Nadie quiere pisar caca!

Puedes comprarte un soporte para bolsa que se adhiera a la correa de tu perro o guardar las bolsas en el bolsillo antes de salir por la puerta. Por otra parte, recuerda depositar las bolsas llenas en el contenedor de residuos (el gris) a lo largo del paseo. Tranquilo, no es repugnante una vez en la bolsa y simplemente es amable y agradable para la comunidad.

Tú tienes el control

Para que los paseos sean placenteros y seguros, debes mantener el control de tu perro en todo momento. Mantén a tu perro a tu lado cuando esté cerca de otros perros o personas con una correa corta. Puede hacer que los paseos sean menos estresantes al entrenar también a caminar con la correa suelta.

Esto le permitirá a tu perro tener muchas oportunidades de olfatear durante la caminata. Después de todo, ¡la nariz de tu perro es la principal forma en que explora su mundo! (En este artículo encontrarás más información sobre el olfato)

Para tu tranquilidad, considera entrenar a tu perro para que se detenga y se siente en las intersecciones o antes de cruzar la calle, especialmente en la ciudad. Tampoco dejes que tu perro entre en patios privados y asegúrate también de evitar que haga sus necesidades ahí... Por último, mantén a tu perro en la acera y en el lado opuesto a la carretera siempre que sea posible.

Maneja las distracciones correctamente

Cuando salgas de paseo, presta atención al entorno que lo rodea. Si notas posibles distracciones (como gatos, pájaros, otros perros) antes que tu perro, es posible que puedas minimizar su reacción. Puedes hacer que tu perro se siente y solo observe mientras pasa la distracción. Tener algún tipo de alimento en tu bolsillo podría ayudarlo a concentrarse solo en ti también.

No des por hecho que otras personas o perros quieren conocer a tu perro. Pregunta siempre antes de permitir que tu perro salude a los demás. Asegúrate de que tu perro esté bien entrenado para conocer adecuadamente a otros perros y personas (especialmente niños). No es de mala educación preguntar y es por tu propia seguridad.

Ten en cuenta las temperaturas

Es importante adaptar tus paseos al clima del día. Intenta realizar paseos cortos en climas cálidos o con perros mayores y, es hora de volver a casa si tu perro deja de caminar, comienza a disminuir la velocidad o muestra signos de agotamiento.

Evita el asfalto en los días calurosos de verano, ya que la carretera puede quemar las almohadillas de las patas de tu perro. Si hace demasiado calor para tus pies descalzos, hace demasiado calor para tu perro. En estos días, considera la posibilidad de caminar en un parque cubierto de hierba y asegúrate de llevar agua. En invierno, protege las patas de tu perro de las carreteras heladas, nevadas o saladas. Mantente atento a las señales de que las patas de tu perro se están enfriando demasiado, ya que son susceptibles a la congelación.